29 ene 2009

LALA

Ella era una mujer tan tenaz, testaruda y decidida que, siendo aún muy joven, arrastró a sus cinco pequeños hijos para huir de un destino que no deseaba para ellos. Cuando ya era vieja, yo la visitaba cada vez que necesitaba un escape, porque junto a ella pasaban las horas, pero el tiempo no transcurría. No era glamorosa, elegante o sofisticada, de hecho era una mujer de modales ásperos, nada refinada. Su tez morena, de un tono bronceado, contrastaba con esos ojos color de miel y expresión gitana. Su figura gruesa y su aspecto pesado, hacían juego perfecto con su voz fuerte y sus palabras toscas; si no lo hubiera testificado el retrato amarillento que se sostenía precariamente junto a la ventana, nadie hubiera imaginado que alguna vez fue una mujer tan bella.

Cuando llegaba a verla, me convidaba sin falta a su mesa de sillas desiguales, y me alimentaba irremediablemente con huevos más que fritos, o carne algo quemada, pan recalentado, café del malo, y talvez un trago de brandy, vino barato o ron de caña. No me importaba que viviera en un barrio pobre, o que su apartamentito de un sólo ambiente mostrara ese desorden tan desconcertante. Tampoco me importaba el polvo amontonado en la maquina de coser que, olvidada en un rincón, contaba pasadas historias de remiendos, vestidos ajenos y noches desveladas, o el mazo de cartas con el que, según yo, la señora se ganaba unos centavos extras embaucando a sus vecinas, prediciéndoles la buena y la mala fortuna, Una noche que la encontré leyendo a solas la baraja, cariñosamente la traté de farsante; minutos después, en un momento mágico, mi pasado, presente y futuro convergían sobre la mesa, sin haber tomado su lugar definitivo en espacio y tiempo. Vi mi vida reflejarse entre espadas, oros, copas y vastos, y humildemente ofrecí mis disculpas a esa gran señora.

Mi abuela Lala heredó todas sus propiedades a mi madre y sus hermanos; al resto de su familia no le dejó nada, excepto a mí, pues, al ser el único interesado, recibí de ella palabras dulces, miradas amorosas, mimos, cariños, momentos incomparables... y una baraja española. Ella fue la preferida de mis cuatro abuelos, y yo, el preferido de sus once nietos.



25 comentarios - Escribe aquí tu comentario

lo dijo kitti a Mapache 19 Agosto 2008 | 09:03 AM

Una delicia de texto, Mapache, francamente entrañable.

Ya ves, tu otra abuela prefería a tu primo pero en esta relación tuviste ventaja. Valió la pena.

Un beso

PD: Gracias por las agradables respuestas a mis comentario.

lo dijo La dama descubierta 19 Agosto 2008 | 10:17 AM

Mapi, me has hecho sacar una sonrisa, porque a mi abuela la llamábamos Lala también.

Que maravillosos recuerdos atesoras. Por supuesto que te permitimos desenterrarlos, es un gusto compartirlos contigo.

Dime, ¿se han hecho realidad los vaticinios que tu abuela te hizo?

Besos en el recuerdo

lo dijo Rubentxo 19 Agosto 2008 | 11:26 AM

Mapache, ¿ya habías colgado en algún momento este post? Me resulta familiar.

No sólo es entrañable, es sentido, sincero y cariñoso.

Un brindis por tu abuela, con la copa de la sota que has puesto por imagen.

Saludos.

lo dijo LAINMETA 19 Agosto 2008 | 11:31 AM

Mapache, precioso. Que fuertes nos hacen los bellos recuerdos, el sentirte querido y querer así sin trampa ni cartón. Algún día os hablaré de mi abuelo.

lo dijo naná 19 Agosto 2008 | 11:46 AM

preciosos recuerdos y precioso texto... las abuelas son especiales, verdad? yo echo muchisimo de menos a la que no está conmigo...

un relato precioso, de verdad.

besos

lo dijo Violetaberna 19 Agosto 2008 | 11:58 AM

Que historia tan bonita y tierna!!

Me encantó como lo contaste.

Un beso!

lo dijo El Mapache a Kitti 19 Agosto 2008 | 02:45 PM

Esa predilección de mi abuela Lála hacia mí tenía su razón de ser. Sus otros nietos no eran muy apegados a ella como siempre lo fui yo.

Muchas gracias Kitti, es un placer recibir tus visitas, y visitarte es todo un deleite.

BESOS

lo dijo El Mapache a Dama Descubierta 19 Agosto 2008 | 02:56 PM

Si, mi abuela no sólo me dijo las cosas que estaba viviendo en ese momento... también me vaticino el futuro... Y aquí estoy, viviendo ese futuro, tal como ella me lo mostró.

Es curioso, yo nunca he creído en esas cosas JAJAJA. Así que tu también tenías una abuelita Lala.... mira que cosas, Me encantaría que escribieras algo de ella.

Muchas gracias Dama, eres todo un sol

BESOS

lo dijo EL Mapache a Rubentxo 19 Agosto 2008 | 07:34 PM

Sí, Rubén (qué buena memoria tienes) este texto lo he desenterrado de las arenas movedizas. para re-publicarlo. Lo he editado un poco... cosas puramente cosméticas.

Gracias por brindar conmigo a la memoria de Lála.

SALUD

lo dijo Luz Marina 19 Agosto 2008 | 08:09 PM

Dichoso tú, te heredó la dicha de ver, de jugar y deleitarte en ellas.

Gustavo, tus escritos me permiten mirar la vida de ellos, mis abuelos, los que nunca conocí, pero si sus propiedades. Por ello, me los imagino y los traigo en mis sueños.

Gracias por tus comentarios.

lo dijo El Mapache a Lainmeta 19 Agosto 2008 | 08:12 PM

Sí, querida Lainmeta, cuéntanos de tu abuelo.. Ellos, nuestros abuelos, eran gente de la que ya no queda. Difícilmente nuestra generación podrá dejar la clase de recuerdos y la clase de imagen que, a nosotros, nos dejaron ellos.

Gracias por pasar por esta TU casa.

BESOS

lo dijo Ishtar 19 Agosto 2008 | 08:38 PM

Esta muy bien descrita la imagen de tu abuela Lala, con todo detalle, sobre su voz, su aspecto.

Y también cuidas de mostrar esa forma de humildad que tenían los personajes de nuestra pasada generación. Y me gusta que te sientas ligada a ella también por ello.

Y si ella leía las cartas, date cuenta que desde antiguo este era un instrumento para reunirse en torno a unas figuras simbolicas y que tambien posibilitaba la comunicación entre las personas. Lo importante no es saber leer el futuro sino el hecho ya en sí de saber anticiparlo o de ponerlo delante de ti.

No sé si tu abuela te diría que te dedicarías a escribir o a alguna acitvidad intuitiva tuya, pero desde luego algo de eso sí has heredado entre esas cartas que ella te dejó.

Así que tienes un buen camino trazado...

Un gran beso, y gracias por el comentario que le has dejado a danny sobre mí!!!

lo dijo El Mapache a Naná 19 Agosto 2008 | 09:19 PM

Muchas gracias Naná, Yo los echo de menos a todos ellos... incluida a mi bisabuela, que todavía conoció a mi primer hijo -su tataranieto- y también extraño al segundo esposo de una de mis abuelas... mi quinto abuelo.

Ellos, sin duda, fueron parte de una generación diferente a la nuestra... Por eso los recordamos como personas excepcionales, llenas de valores y principios que ahora, en su mayoría, han quedado en el olvido.

Gracias por la visita y por las palabras.

UN BESO

lo dijo El Mapache a Violeraberna 20 Agosto 2008 | 02:15 PM

Muchas gracias, querida Violetaberna. Es fácil escribir cuando las cosas que escribes afloran del alma.

Encantado de verte por acá, eso siempre es un placer para mi.

BESOS

lo dijo Marta 20 Agosto 2008 | 02:44 PM

Mi querido y sensible caballero,

Un relato tierno y entrañable, de descripción precisa y facil de imaginar. Unos tiempos que ya no volveran pero que permaneceran en tu memoria y que has sabido transmitir.

Besos mediterráneos amigo y caballero, y deleítanos siempre con tan exquisita sensibilidad.

lo dijo El Mapache a Luz Marina 20 Agosto 2008 | 04:26 PM

Realmente fue una dicha para mi haber conocido a mis 5 abuelos (incluyo al padrastro de mi padre) incluso conocí a mi bisabuela, que cargo en brazos a mi primogénito. También conocí a uno de los hermanos de mi abuelo materno (un amor de persona a quien quise muchísimo, no era escritor, pero era un fantástico contador de cuentos) Imagínate, con la sabiduría que se adquiere con los años, cuánto no hubiera podido aprender de la vida si hubiera puesto aún más atención a sus consejos.

Mis comentarios en tu blog son los de un ignorante en asuntos de poesía, un simple espectador del espectáculo que es tu pluma cuando se posa en un papel.

Gracias a ti por venir hasta acá y leerme

BESOS

lo dijo El Mapache a Ishtar 20 Agosto 2008 | 07:01 PM

Mu interesante comentario, Ishtar. En esa oportunidad, mi abuela no me habló de otra cosa que no fueran asuntos de faldas... (complicadas situaciones que vivía en ese tiempo) pero acertó totalmente, hasta me dijo con quién me iba a casar.

Gracias por tus palabras. me alegra que te haya gustado el post

BESOS

lo dijo El Mapache a Ishtar 20 Agosto 2008 | 07:01 PM

Mu interesante comentario, Ishtar. En esa oportunidad, mi abuela no me habló de otra cosa que no fueran asuntos de faldas... (complicadas situaciones que vivía en ese tiempo) pero acertó totalmente, hasta me dijo con quién me iba a casar.

Gracias por tus palabras. me alegra que te haya gustado el post

BESOS

lo dijo El Mapache a Marta 20 Agosto 2008 | 08:49 PM

Ahhh pero si es la bella y mediterránea dama del tazón de chocolate.. ¡Qué gusto me da que hayas vuelto por acá!. Ya me he metido a tu blog para husmear un poco. Me hace falta leerte.

Gracias mil, querida Marta.

BESOS

lo dijo Zarza 21 Agosto 2008 | 09:43 AM

Tuviste la mejor herencia, la mejor semilla. Su fruto eres tu mismo....Besitos.

lo dijo El Mapache a Zarza 21 Agosto 2008 | 02:17 PM

Qué comentario tan bonito, querida amiga. Las mejores herencias que puede dejarnos un ser amado son las cosas que quedan arraigadas en el corazón.

Besos.

PD. Pensé que estabas de vacaciones. Iré a tu blog para ver si has dejado algo nuevo.

lo dijo Poemas 19 Octubre 2008 | 07:35 PM

No creo que las palabras se las lleve el viento. Pienso que, de todo lo que leemos, tomamos lo necesario para aprender.

Me gustó tu presentación, es original.

Gracias.

lo dijo El Mapache a Poemas 22 Octubre 2008 | 08:48 AM

Antes que todo, ofrezco disculpas por responder a tu comentario con tanta dilación.

Muchas gracias por tu visita y por tu comentario... opino lo mismo que tú en cuanto a las palabras... Qué te puedo decir de mi presentación, únicamente que es honesta y transparente. Ese soy yo, sin más.

Un abrazo

lo dijo El Mapache a Poemas 22 Octubre 2008 | 08:48 AM

Antes que todo, ofrezco disculpas por responder a tu comentario con tanta dilación.

Muchas gracias por tu visita y por tu comentario... opino lo mismo que tú en cuanto a las palabras... Qué te puedo decir de mi presentación, únicamente que es honesta y transparente. Ese soy yo, sin más.

Un abrazo

lo dijo El Mapache a Poemas 22 Octubre 2008 | 08:49 AM

Antes que todo, ofrezco disculpas por responder a tu comentario con tanta dilación.

Muchas gracias por tu visita y por tu comentario... opino lo mismo que tú en cuanto a las palabras... Qué te puedo decir de mi presentación, únicamente que es honesta y transparente. Ese soy yo, sin más.

Un abrazo