Nunca me había sentido tan sólo como esa noche de enero. A pesar de la fresca brisa que corría, me hacía falta el aire. Las paredes sofocaban mi alma y lo mismo me sucedía con el espacio abierto, con el cielo que lucía esas abundantes estrellas que se observan en los inicios y postrimerías de cada año. Salí de casa como quien huye del mal. Necesitaba urgentemente distraer mi atención del deseo casi incontenible de correr tras la mujer a quien, por mi propio bien, había jurado no volver a buscar en la vida.
De pronto me vi frente a la casa de esa muchacha preciosa. Días atrás, “en una noche entre diciembre y año nuevo”, había tomado la solitaria decisión de darme una oportunidad con ella. Necesitaba una excusa para llegar sin ser tan obvio: ¡Yuca!, ¡Eso es!...... Yuca, extraída con mis propias manos de la finca de mi abuelo, donde me había embarcado en la aventura de cultivar la tierra. Don Héctor me había encargado unos pedazos para preparar cierto dulce que era todo un misterio.....ese sería mi pasaporte para acercarme impunemente a su hija; la yuca que había olvidado descuidadamente detrás del asiento del pick-up y que nunca hubiera podido venir más a mano. Entré preguntando por el viejo. No estaba. Mi candidata a cuñada recibió el encargo y cordialmente me invitó a pasar adelante, acepté entrar por un instante, esperando que la suerte estuviera de mi lado y ella apareciera saludándome.
¿Cómo iba a pedirle que saliera conmigo después de cinco años de no mostrar mi interés? ¿Cómo? si jamás había invitado a nadie a salir en una cita. -Ese no era mi estilo. Yo, maquiavélicamente, aprovechaba momentos y circunstancias, pero nunca mostraba interés, pues eso me ponía en desventaja- Pude escucharla hablando con alguien en otra habitación, pero no llegó a salir, y yo tuve que retirarme sin concretar mis planes.
Inmediatamente fui en busca de un teléfono, sabía que no debía pasar un día más sin pedirle que saliera conmigo. Tomé el auricular y después de un profundo suspiro, puse mi dedo índice en el disco; era en ese momento o nunca: nueve, uno, tres, nueve, siete, seis...... Ahí estaba escrito por su puño, en el reverso de un pedazo de papel que aún conservo.
-Hola, soy Gustavo Abril ¿Cómo estás? Disculpa mi impertinencia, pero quería pedirte la receta para ese dulce de yuca que prepara tu padre; traje un poco de la costa y quisiera intentar hacerla de esa manera. (como suele pasar cuando estoy nervioso, sudaba copiosamente). Sí, estoy anotando. ¿Homogeneizar? ¿Que es eso? Ah, si, entiendo. ¿Hidratar? (jaja) claro...... Con H20 ¿Verdad? (ésta no sabe nada de cocina...pienso) ¿Cuanto tiempo? A 250º, si la tengo, gracias. Y cambiando el tema...... ¿Supiste que llegué a tu casa? Quería hablarte, pero me dio mucha pena interrumpirte. Sí, claro...... por la receta, pero también quería decirte algo: seré sincero contigo, me siento terriblemente sólo, y quisiera saber si aceptarías salir conmigo uno de estos días..... ¿Siiiii? ¡Magnifico! ¿Te parece bien el domingo por la tarde?...... perfecto, paso por ti a la 1:30. No, nada formal, como te sientas más cómoda. Hasta el domingo, que pases buena noche. Adiós...... Y GRACIAS.- Uffff, exhalé aliviado, tratando de secar con la mano el sudor de mi frente, y de borrar, con una mueca seria, la cara de inmensa alegría que tenía.
Siempre he creído que un evento puede ocurrir fortuitamente, pero un verdadero acontecimiento se crea, se planea y se ejecuta.
Nuégados de yuca como los de la receta de mi difunto suegro
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19 comentarios - Escribe aquí tu comentario
Un placer leerte. Bonito planteamiento el tuyo. Sugestiva receta :-).
Suerte en esa cita y en las sucesivas.
Saludos
Gracias, Vagabunda.... en la cita me fue muy bien.... igual en las sucesivas. Me casé con ella. (jajajajaja)
BESOS
Supongo que sí, Gustavo, los acontecimientos no llegan sin más, la mayoría de las veces hay que buscarlos. Esperar sentado no sirve de mucho.
Mmmm. Daría lo que fuera por probar ahora mismo uno de esos nuégados de yuca. Voy a buscar la receta en San Google y probaré a hacerlos.
Saludos, valiente.
Hola Rubén..... qué gusto verte por acá nuevmente..... Ves que me pasé de valiente... y eso me costó la soltería.... jajajaja
Espero que encuentres la receta..... si no la encuentras le preguntaré a mi suegra.... (si es que la recuerda) y te la haré llegar.
Muchas gracias por no olvidar que este sitio es tu casa.
UN FUERTE ABRAZO
Normalmente vengo aquí a nutrirme de buena literatura. Pero hoy, la verdad, he venido alertado por el olor de los postres. Jeje.Esos nuégados... mmm...
(PD: Estoy a dieta. ¿Se nota?)
¡Hasta pronto!
Es muy bonito lo que nos cuentas, supongo que es importante esa ilusión contenida y el momento en que emerge y tú sientes la necesidad de hacerla brotar en ti.
Te quiero decir que hay belleza en la espera, en idear esa forma de encuentro, y también en ella que al parecer te había escrito anteriormente su teléfono...
Es una historia muy bonita, gracias por compartirla. Un gran beso!
Pillín, ¿conque así fue como "cazaste" a tu nene, eh? jaja, fue una buena estrategia. Y tienen que estár buenos. Yo tambien me apunto a la receta como Rubentxo.
Gracias por compartir esa bella historia con nosotros.
Muaaaaaaaaaaaaaa
Que rico es leerte Gustavo, triste es que LDA a veces no nos permite dejar comentario. Gracias amigo por tus comentarios.
No me hables de dietas...... las tengo en la coronilla.....jajajaja.
Mis mejores deseos por que alcances tu meta con la dieta.
ABRAZOS
MI querida amiga.... me tienes tan desorientado con esos cambios de nombre... jajajaja.
La historia de cómo Patricia y yo llegamos a parar juntos es larga y llena de recovecos: 5 años de miradas delatadoras e indirectas, un noviazgo que sorprendió a todos (nosotros dos incluidos) y un matrimonio que en algún momento se volvió borrascoso... pero que hoy es lo mejor que tengo y que mejora día con día. Sí... ella me dio su teléfono un día... No era mujer que tuviera miedo a tomar la iniciativa.
BESOS
MI querida amiga.... me tienes tan desorientado con esos cambios de nombre... jajajaja.
La historia de cómo Patricia y yo llegamos a parar juntos es larga y llena de recovecos: 5 años de miradas delatadoras e indirectas, un noviazgo que sorprendió a todos (nosotros dos incluidos) y un matrimonio que en algún momento se volvió borrascoso... pero que hoy es lo mejor que tengo y que mejora día con día. Sí... ella me dio su teléfono un día... No era mujer que tuviera miedo a tomar la iniciativa.
BESOS
Así fue cómo me animé a "caerle" (término chapín para denominar el proceso de aproximación) Pero en esa cacería no sabría decirte quién fue el cazador y quien la presa.... creo que nos cazamos mutuamente.
BESOS GUAPA
pd.... Los nuegados de yoca tienen un defecto.... llevan mucho anís... eso significa que pueden provocar un tremendo estado de flatulencia. Así que es recomendable comerlos a solas.... jajajajaja
No mi amiga..... gracias a ti por tu poesía y por honrar este lugar con tus visitas.
Un beso
PD.... LDA no cambia.... Tengo horas de estar tratando de escribir esta respuesta a tu comentario
Dicen que el "eterno femenino" radica en ese estado de desorientación de la mujer...
lo digo porque te desorientabas...
Is good to know..... Gracias por aportar conocimiento a mi acervo.
BESOS
hola mi mapache, como siempre un placer leerte, ¿me perdonaras tu y todos si dejo comentarios escuetos? ando con prisas....
besos
No te aflijas por la brevedad de tus visitas, tu presencia es más que suficiente para alegrar el día, mi querida y refrescante amiga.
BESOS
Saludos, desde las orillas del mediterráneo. Sentidas palabras las de tu relato.
Gracias Wne.... Todo un honor para mi recibir tu visita en esta casa.
Un abrazo